Las revistas del corazón están siempre atentas a los nuevos escándalos de la familia Grimaldi, que no han sido pocos en los últimos años. Muy a menudo, el Principado tiene que soportar la ola de cotilleos y rumores que se presentan por un motivo u otro. Pero esto es algo con lo que Alberto de Mónaco lidia desde hace décadas. De hecho, durante algún tiempo fue el soltero de oro que se negaba a formalizar una relación y tener un heredero. No obstante, poco a poco se descubren sus aventuras. Con amantes en cada puerto, ¿lo puedes creer?
Actualmente, Alberto de Mónaco tiene una familia muy bonita. Por más que su relación con Charlene de Mónaco parezca inexistente, están dispuestos a permanecer unidos por sus hijos y las responsabilidades de sus cargos. Eso sí, antes de contraer matrimonio, protagonizó varias polémicas. Su relación de hoy en día se debe a la presión por parte de la familia y la sociedad monegasca, quienes insistían en que debía casarse y tener un descendiente.
No se puede olvidar tan fácil su “rechazo” a los compromisos estables y públicos, situación que por muchos años hizo cuestionar sus gustos. Lo que no todos saben es que parte de su pasado lo persigue, sus noches de aventuras con una camarera y una azafata.
La doble vida de Alberto de Mónaco que acabó en descendencia ilegítima
Dos de los affaires del príncipe soberano están en boca de todos. El primero se remonta al verano de 1991, en las vacaciones en Francia. Una camarera regresó a Estados Unidos embarazada del príncipe heredero. Tamara Rotolo poco podía prever que algo así pasaría, por lo que a su vuelta firmó los papeles de divorcio. Nueve meses después le dio la bienvenida a una primogénita no oficializada. Jazmin Grace no conoció a Alberto hasta que cumplió 11 años, y a los 14 años finalmente obtuvo su apellido (coacción por demanda).
El segundo fue un romance con una azafata que se prolongó por años. Aparentemente, desde 1997 hasta 2003. Cuando el príncipe Rainiero tuvo plena conciencia de esta relación oculta, obligó a su hijo a terminar todo. Y, pese a que el actual jefe de la Casa Grimaldi obedeció, más adelante reconoció al hijo de Nicole Coste. De acuerdo con El Universo, no se legalizó la paternidad hasta 2014. Aunque intentó mantener este secreto en lo más profundo, Coste vendió la historia a Paris Match y los tribunales se encargaron de exigir su responsabilidad.

Ni Jazmin ni Alexandre están en la línea de sucesión al trono, por lo que no se encuentran relacionados con el Principado. Así que las aventuras del esposo de Charlene eran un espectáculo más. Pero hace unos meses se hizo viral una fotografía en la que posan los 4 hijos del soberano, incluidos el príncipe y la condesa. Recientemente, el Daily Mail mostró una instantánea en la que aparece el padre con sus dos hijos mayores por primera vez. Sentados muy juntos y con grandes sonrisas, se muestra el cariño que se tienen.
Al parecer, Alberto de Mónaco consiguió un balance entre su vida familiar en Mónaco y arañar algo de tiempo para ver a sus otros hijos.