Casa Real

Carolina de Mónaco, extraordinaria a los 66 años, un ejemplo de cómo envejecer sin retoques

La hermana de Alberto de Mónaco sigue callando bocas con su belleza natural

Martes, 11 de julio de 2023. 16:00 / Actualizado: Martes, 02 de enero de 2024. 11:13
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Stéfano Casiraghi y Carolina de Mónaco

No es que sea precisamente ningún secreto que los miembros de las casas reales en Europa, especialmente a las mujeres, han sido siempre objeto de la prensa del corazón, entre otras cosas porque muchos y muchas las han visto como las auténticas referencias de lo que se refiere a la belleza, la moda y el estilo.

Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover
Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover

En este sentido, uno de los referentes desde hace ya muchos años no es otra que Carolina de Mónaco, la hermana del actual monarca del principado. Eso sí, cabe tener en cuenta que, a diferencia de lo que ocurre con otros miembros de las diferentes casas reales de Europa, entre ellas la española, donde Letizia no es que le tenga precisamente mucho miedo al bisturí, más bien lo contrario, Carolina de Mónaco está evidenciando los últimos tiempos que está sabiendo envejecer de una manera natural demostrando que se puede seguir siendo tremendamente bella a sus 66 años.

Carolina de Mónaco deja en evidencia a otras con su espectacular belleza

Tan solo hace falta ver algunas de las fotos actuales de Carolina de Mónaco para darse cuenta de que, por ejemplo, a diferencia de muchas otras mujeres de su edad incluso mucho más jóvenes, la hermana de Alberto de Mónaco no tiene ningún tipo de intención de teñirse el pelo, haciendo evidente que las canas le sientan más que bien.

Por otro lado, si bien es cierto que en alguna ocasión podría haber hecho algún tipo de retoque estético, el paso de los años se hace evidente en su cara, aunque eso no implica que su belleza haya desaparecido, más bien lo contrario.

Así, como ha ocurrido durante toda su vida en otras facetas como la del estilo a la hora de vestir, para muchos y muchas Carolina de Mónaco sigue siendo un verdadero ejemplo de cómo envejecer manteniendo la belleza que tenía cuando era una de las jóvenes más alabadas por su belleza en el viejo continente.