Jaime de Marichalar, conocido por su matrimonio con la infanta Elena, ha logrado forjar una carrera exitosa por méritos propios, distanciándose del apellido real con el que estuvo relacionado y construyendo su propio camino en el mundo empresarial. Si bien su matrimonio con la infanta Elena le otorgó un título nobiliario y acceso a círculos de poder, Jaime del Marichalar ha sabido capitalizar estas oportunidades para desarrollar su propia trayectoria profesional.
Así es cómo ha conseguido éxito el padre de Froilán y Victoria Federica
Inicialmente, su matrimonio con la hija de Juan Carlos I le proporcionó una plataforma para establecer contactos y relaciones con personas influyentes en la sociedad española y europea. Esta red de contactos le permitió explorar nuevas oportunidades de negocio y expandir sus horizontes más allá de los confines de la realeza. Con el tiempo, Jaime del Marichalar ha demostrado su capacidad para aprovechar estas conexiones en beneficio propio, desarrollando una exitosa carrera en el mundo de la moda y el lujo.
Actualmente, Jaime del Marichalar se desempeña como consejero de las prestigiosas marcas de moda Loewe y Fendi, lo que refleja su experiencia y conocimiento en el sector. Su papel como asesor en estas reconocidas firmas demuestra su capacidad para mantenerse relevante en un ámbito altamente competitivo y en constante evolución. Además, es propietario de la firma B-Corner, una empresa que ha sabido ganarse un lugar en el mercado gracias a su enfoque innovador.
A diferencia de otros miembros de la familia real española, como Iñaki Urdangarin, Jaime del Marichalar ha logrado mantenerse alejado de la controversia y los escándalos, centrando su atención en su carrera profesional y en el desarrollo de sus proyectos empresariales. Su éxito empresarial es un buen ejemplo de lo que puede hacer una persona con los contactos y las ganas necesarias.
Juan Carlos I no ha tenido que ayudar a Jaime de Marichalar como si tuvo que hacerlo con Iñaki Urdangarin
Es importante destacar que Jaime de Marichalar ha sabido separar su vida personal de su carrera profesional, manteniendo un perfil discreto y enfocándose en sus responsabilidades laborales y empresariales. No ha necesitado de la ayuda de Juan Carlos I tal como muchos han dicho, aunque eso sí, de cierta forma, se aprovechó de su matrimonio con la infanta Elena. Sin embargo, también supo aprovechar los recursos que tuvo disponible, sobre todo valiéndose de su agilidad para los negocios y sus contactos.
El ex esposo de la infanta Elena está lejos de la polémica, aunque de vez en cuando vuelve a estar en los titulares debido a sus hijos, ya que tanto Froilán como Victoria Federica llevan una vida muy animada. A uno le gustan las fiestas en exceso y la otra es una influencer que no sale de las discotecas. Sin embargo, Jaime de Marichalar apoya a sus hijos y no tiene nada en contra de que estos lleven esas vidas, pues consideran que están jóvenes todavía.