Casa Real

Juan Carlos I se ha metido en la cama con una prima suya de sangre azul

La reina Sofía nunca vio con buenos ojos a esta conquista de Juan Carlos I

Barcelona. Martes, 02 de abril de 2024. 15:30 / Actualizado: Viernes, 05 de abril de 2024. 10:49
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Juan Carlos I

La vida amorosa del ex monarca Juan Carlos I ha sido un tema recurrente de titulares y especulaciones a lo largo de los años. Las múltiples historias de infidelidad y relaciones amorosas han empañado la imagen del rey emérito, afectando su matrimonio con la reina Sofía y su papel como figura emblemática de España.

La extensa lista de amantes del rey emérito, que incluye nombres como Corinna Larsen, Bárbara Rey, Marta Gayá, Olghina de Robilant y Gabriela de Saboyas, entre otros, ha contribuido a la percepción negativa de Juan Carlos I y su matrimonio con la reina Sofía.

Juan Carlos I tuvo un affaire con Diana de Orleans

Entre las numerosas amantes del rey emérito, hay un nombre que destaca: su prima de sangre azul, Diana de Orleans. Revelado por la periodista Pilar Eyre en el programa "Cazamariposas", este affaire arroja nueva luz sobre la complejidad de la vida amorosa de Juan Carlos I. Diana, casada con el duque Carlos de Wurtemberg, mantuvo una relación extramatrimonial con el emérito durante años, manteniendo el secreto celosamente guardado.

Diana de Orleans
Diana de Orleans

La revelación de esta relación ha generado sorpresa y controversia, especialmente por tratarse de una prima de Juan Carlos I. Este hecho añade un nuevo matiz a la lista interminable de amantes del rey emérito, evidenciando la complejidad de sus relaciones personales.

La reina Sofía siempre miró con recelo a Diana de Orleans

La animadversión de la reina Sofía hacia Diana de Orleans no se debe únicamente a su romance con Juan Carlos I, sino también a los comentarios despectivos que hacía sobre sus hijos: las infantas Elena y Cristina, y el rey Felipe VI. Diana criticaba abiertamente la educación de los tres, acusándolos de ser maleducados y de no respetar a las personas mayores.

La revelación de este affaire ha avivado aún más el escrutinio público sobre la vida privada de la familia real española, erosionando aún más la imagen de Juan Carlos I como figura emblemática de la monarquía.