Juan Carlos I y su esposa, la reina Sofía, han tenido sus baches en el camino y han experimentado el amor de una forma un tanto rara. Tanto así que incluso Juan Carlos I quiso darle el título de princesa de Borbón a alguien más para que se casara con él. A día de hoy se sabe que el emérito no era ningún santo y que las mujeres formaban una parte importante en su vida, y es por eso que tuvo tantas amantes. ¿Mujeres a las que de verdad amaba? eso no lo sabemos del todo.
La mujer que contó esto fue nada más ni nada menos que Corinna Larsen, una de las tantas mujeres que tuvo relación con Juan Carlos I, pero no una relación cualquiera, sino que los dos estuvieron juntos por más de 10 años. No es que estos hubieran vivido estrechamente durante esos años, pero durante esos 10 años tuvieron una relación muy cercana. Llamadas, citas secretas y demás, todo porque el rey Juan Carlos I estaba “enamorado”.
Confesaba Corinna Larsen que ella también se sentía enamorada del emérito en aquella época, pero sabía de sobra que las cosas no iban a ser fáciles, y vaya que tuvo razón. Sin embargo, ese enamoramiento estuvo en los primeros años de la “relación”. Luego de eso, Juan Carlos I le pidió matrimonio 2 veces, pero ella se negó rotundamente. No era boba.
“Te daré un título nobiliario para que te cases conmigo”
Se sabe que Juan Carlos I siempre fue un hombre apasionado cuando se trataba de sus amores. En el caso de Corinna Larsen, Juan Carlos I le llegó a regalar incluso 65 millones de euros en una ocasión, dinero que luego le pidió de vuelta. Pasaron muchas cosas y ahora Corinna está contando todo lo que vivió junto a Juan Carlos I, y una de las cosas que contó justamente tiene que ver con una propuesta de matrimonio.
El plan del emérito era sencillo, casarse con Corinna Larsen. Sí, eso era todo. Sin embargo, había un problema, él estaba casado con la reina Sofía. Aunque hoy en día la separación que tienen los dos es un secreto a voces, en aquel momento no tanto, y por ello mismo Corinna Larsen se negó rotundamente en las dos ocasiones en las que Juan Carlos I le ofreció ser su prometida.
“Un hombre católico no se puede divorciar” le afirmó ella al rey, el cual le preguntó “¿No?”. Sin embargo, esto no fue impedimento suficiente para el emérito, el cual le ofreció el título de Su Alteza Real la Princesa de Borbón, un título nobiliario que el emérito pensó para destronar a la reina y empezar una nueva vida con aquella mujer con la que mantenía relación desde hace muchos años.
Todo esto lo ha contado Corinna Larsen y no ha tenido problemas en soltar cada vez más y más detalles, por lo que es posible que próximamente cuente más acerca de su relación con Juan Carlos I.