La reina Isabel II falleció el pasado 8 de septiembre y se hicieron los respectivos actos para honrar a la soberana y a sus más de 70 años de mandato, lo cual es casi un récord. Sin embargo, el récord fue el que batió la familia real con el luto que se impuso para honrar la memoria de Isabel II.
Después del entierro y de los actos pertinentes, no había pasado un par de semanas cuando ya la familia real estaba llevando su vida como si nada pasara. El nuevo rey Carlos III y hasta Guillermo y Kate Middleton vestían como quisieran y hasta asistían a lugares públicos de la forma más tranquila del mundo.
En cambio, el único miembro de la familia real que decidió prolongar un poco más el luto por la difunta soberana fue el príncipe Harry, el cual, pese a que había regresado a California, tuvo la decencia de mantener el luto un poco más en respeto a su abuela y su memoria.
La actitud de Harry hacia su abuela fue mucho más respetuosa
Harry siempre le tuvo un gran cariño y respetó a su abuela, quizás por eso su decisión de prolongar un poco más el luto. A pesar de que este se desligó en gran medida de la familia real y que no estaba del todo de acuerdo con ciertas normativas de la familia real, lo cierto es que él quería a su abuela y mucho.
La noticia del fallecimiento de Isabel II le cayó como un balde de agua fría y ese día 8 de septiembre se presentaron algunos problemas que evitaron que pudiera despedirse como era debido de su abuela.
Quizás por eso tomó la decisión de tener un luto diferente al del resto de su familia. De hecho, ya una vez estando en su casa en California, este se reunió por Zoom a las semanas con los niños que ganaron los premios de la organización WellChild, una organización benéfica a la cual él apadrina. Justo el 8 de septiembre se hicieron la entrega de estos premios, pero por obvias razones el duque de Sussex no pudo asistir.
El caso es que se dejó ver en esta videollamada con una camisa negra, la cual daba a entender perfectamente que, pese a que habían pasado semanas, el príncipe Harry aún mantenía aquel luto en respeto a su abuela, aunque claro, este no lo dijo para nada en aquella videollamada, pero eso sí, se le notó bastante animado en esta videollamada).
A día de hoy, ya varios meses después del fallecimiento de la reina Isabel II, es evidente que el príncipe Harry ha aminorado el luto que mantenía hasta hace meses atrás, pero todavía se le nota cierto respeto a la hora de hablar de su abuela e incluso de su familia. De cierta forma, se nota que este no estuvo del todo de acuerdo con la forma de llevar el luto de su familia.