Pedro Almodóvar es un nombre que inspira mucho respeto en el mundo del cine español, pero también en el cine a nivel mundial. Su reputación le precede y todo el mundo sabe quién es Pedro Almodóvar, y, de hecho, Silvia Hughes, de nacionalidad argentina, lo conoce muy bien. Es su “peor pesadilla” y la causa principal de que a día de hoy ya no se dedique a la actuación. La ex actriz tiene una historia bastante interesante con el director de cine, una historia que explicó a fondo recientemente indicando que la “industria es cruel”.
Pasó de ser estrella junto al mismísimo Antonio Banderas hace muchos años a no tener casi papeles a la hora de actuar en grandes películas, y esta culpa se la atribuye a Pedro Almodóvar, aunque Silvia Hughes indicó que las circunstancias eran bastante injustas de por sí.
¿Cuál fue la historia de la actriz con el director? Es un tanto extensa, aunque por supuesto ahondaremos en ella en las siguientes líneas,pues es una historia muy interesante dado el contexto y todo lo que sucedió.
Todo el mundo creyó que Silvia Hughes era la nueva favorita de Pedro Almodóvar
Muchos directores de cine suelen tener un carácter bastante complicado y muchas veces bastante difícil de entender, y es de esta misma forma en la que Silvia Hughes ve a Pedro Almodóvar, al cual culpa de no haber tenido más trabajo luego de trabajar con él, y no es que la actriz haya hecho un mal trabajo, sino que una serie de acontecimientos entorpecieron la relación de ambos.
Todo comienza cuando a la actriz recibe una llamada de su agencia en el año 2010 diciéndole que quedó como figurante en “La Piel que Habito”, película dirigida por Almodóvar y que tenía como protagonistas a Antonio Banderas y Elena Anaya. Por supuesto, Silvia Hughes no había sido escogida para tener un papel importante ni mucho menos, pero esta no dudó en asistir al rodaje de la película, el cual se llevó a cabo en un cementerio de Toledo. Allí solamente bastó con su presencia para que alguien de la producción le dijera que había sido del agrado del director y que este le daría un texto.
Este texto era “No tengo palabras” y lo que tenía que hacer era ir a donde Antonio Banderas, abrazarlo y decirle esto, lo cual, obviamente, sería grabado. Su interpretación no fue la única, pues hubo otras chicas que hicieron lo mismo, pero a la hora de estrenar la película, Silvia Hughes se llevó la sorpresa de que la escena que había grabado ella era la que estaba en la película. Esto le dio una fama indiscutible en Argentina, en donde los medios se encargaron de opacar el papel de la protagonista de la película para hablar en demasía de Silvia Hughes.
A Pedro Almodóvar no le gustó nada de esto
En Argentina le preguntaban mucho a la actriz si era la nueva chica Almodóvar, a lo cual ella respondía de forma negativa, y se llevó una sorpresa cuando se enteró de que al director no le gustó que solo se hablara de ella cuando la protagonista fue Elena Anaya. De hecho, el que se encargó de contarle todo lo que Pedro Almodóvar pensaba de ella fue Andrés Cuenca cuando esta decidió apuntarse a un curso de interpretación a la cámara. Este le dijo que el director estaba muy enfadado con ella y que haría que no trabajara más nunca, y así fue, pues desde entonces Silvia Hughes tuvo casi nada de papeles en la industria, lo cual a día de hoy crítica y con razón.