Emma García es un rostro de la televisión nacional que casi todo el mundo conoce. La de Ordizia empezó en el mundo de la televisión cuando Mediaset le llamó en el 2000 para una oferta importante y que sería la responsable de cambiarle la vida.
Sin embargo, hay algo más que le ha cambiado la vida a la presentadora mucho más que su trabajo y esto ha sido su esposo. Este hombre se llama Aitor Senar y es el pilar fundamental de la vida de la presentadora, tanto que esta misma tomó la decisión de dejar la televisión durante dos años.
El año pasado a finales del mismo la presentadora regresaba a la pequeña pantalla, pero es un hecho de que su principal motivación está en su familia y no tanto en su trabajo.
Esta lealtad de ella hacia su esposo se debe a que ambos se aman mucho, se respetan tal y como debería hacer una pareja y al mismo tiempo tienen una historia bastante longeva, ya que los dos se conocen desde hace más de 33 años, lo cual ya hace que la relación de ambos tenga mucha más fuerza. Sin embargo, hay otro detalle que Emma le agradecerá a su esposo durante toda su vida.
Decidió dejar su vida de lado para que su esposa pudiera crear la suya
Aitor Senar es ingeniero de profesión y este conoció a Emma García cuando apenas eran unos adolescentes. A pesar de que se atrajeron mutuamente, no sería sino hasta tiempo después que estos dos empezaron a salir de forma formal y luego se casarían.
Esta es una anécdota que le parece graciosa a la pareja, pues fue Emma la que decidió dar el primer paso y proponerle matrimonio a su esposo. Enamorado de ella, Aitor aceptó, aunque luego de la boda vendría una prueba de amor que demostraría si lo que sentía Aitor por su esposa era verdadero o no.
En el comienzo del nuevo siglo, Emma García recibía una llamada de Mediaset para que formara parte de la plantilla de presentadores estrellas de la cadena. Sin embargo, la pareja no vivía en Madrid, por lo que llegó el momento de tomar una decisión difícil: mudarse.
Aitor tenía una vida relativamente cómoda con su pareja en la localidad en la que residían, sin embargo, este tomó la decisión de dejarlo todo y mudarse con Emma a Madrid para que esta pudiera hacer lo que quería.
Afortunadamente, todo salió bien y el éxito de su esposa en la televisión subió como la espuma, por lo que su confianza no fue en vano. Esto hizo que Emma quisiera mucho más a su esposo, el cual la apoyó incondicionalmente en todo momento, cosa que a día de hoy sigue haciendo.
Luego de 22 años, la pareja sigue felizmente casada y ahora con una hija que la pareja no deja de darle amor. Sin duda alguna, poco se habla de Aitor y de lo importante que ha sido para Emma García y para su carrera.