La Corona española ha estado marcada por una serie de acontecimientos tanto públicos como privados, que han dejado una huella indeleble en la historia reciente de nuestro país. En medio de estos episodios, emerge una figura central: la princesa Leonor, quien representa el futuro de la monarquía según el plan trazado por su padre, el rey Felipe VI.
En el año 2013, la Casa Real se encontraba en una encrucijada. Escándalos como el caso Nóos, que involucraba directamente a Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, así como las polémicas relacionadas con el rey emérito Juan Carlos I, generaban una seria amenaza para la estabilidad de la monarquía. La sociedad española comenzó a distanciarse de la institución, lo que ponía en riesgo el futuro del reinado. Ante esta crisis sin precedentes, se tomó la decisión de forzar la abdicación del entonces monarca.
La Iglesia está en contra de Leonor
Durante la última década, el rey Felipe VI y la reina Letizia han desplegado una incansable labor para distanciarse de los escándalos que han sacudido a la Familia Real. Una de sus primeras acciones fue la supresión de responsabilidades y asignaciones presupuestarias de los familiares del rey, como parte de una estrategia destinada a restaurar la imagen de la corona. Además, han optado por mantenerse alejados de la presencia pública junto a otros miembros de la Familia Real.
La Iglesia está en contra de Leonor
La reina Letizia ha centrado sus esfuerzos en separar a la princesa Leonor de la imagen ligada a los Borbón, procurando establecer una identidad independiente para su hija y protegerla de los escándalos que han afectado a la Casa Real en el pasado. Sin embargo, este distanciamiento de Leonor no se limita únicamente a los Borbón, sino que ahora también incluye a los Ortiz Rocasolano.
La estrategia de la Casa Real tras el escándalo de Jaime del Burgo
La decisión de distanciar a Leonor de Letizia fue tomada por Zarzuela luego de las controvertidas declaraciones de Jaime del Burgo, que dejaron a la reina en una posición comprometedora. Las acusaciones de infidelidad y adulterio dirigidas hacia ella humillaron por completo a Felipe, lo que desencadenó una reacción inmediata por parte de la Casa Real. En las recientes apariciones públicas de la princesa Leonor, siempre se la muestra vinculada estrechamente con su padre, lo que ha fortalecido los lazos entre los Borbón más que nunca, en detrimento de la monarca. De hecho, de manera sorprendente, nadie parece estar respaldando a Letizia en este momento de crisis, ni siquiera Felipe, lo que la deja enfrentándose sola a la mayor adversidad de su historia.
La popularidad de Leonor: Una nueva esperanza
En medio de esta crisis, se ha producido un giro inesperado: la popularidad de Leonor entre los ciudadanos españoles ha experimentado un aumento significativo, consolidándola como una figura central en el núcleo de la monarquía. Este fenómeno no ha pasado desapercibido para Felipe, quien ha sabido capitalizarlo hábilmente.
Según fuentes cercanas a La Zarzuela, el rey Felipe VI se muestra "muy ilusionado" con esta nueva etapa en la institución y está plenamente enfocado en el papel que Leonor desempeñará como sucesora en el trono. En este sentido, la renovación y modernización de la monarquía española continúan siendo una prioridad, con Leonor en el epicentro de esta visión de futuro.